todo estuvo super chido, el hotel es peq pero acogedor y los duenos son una familia super amable. el desayuno, una delicia, te lo preparan al momento, no te puedes perder los huevos y bacon de manolo, son un must. la ubicacion es top, cerca de restaurantes y el ambiente es bien calido. mi cuarto era chido y limpio, ni decir de la limpieza, todo spotless.

el parking es un poco complicado y las habitaciones son algo pequeñas. sería genial si mejoraran un poco las amenidades del baño.

encantadora pero con detalles por mejorar

La atención de Eva y Carina fue excepcional, siempre atentas y dispuestas a ayudar. El ambiente del hotel, con su decoración de montaña, te hace sentir acogido desde el primer momento. Además, la vista de las montañas cercanas es realmente impresionante.

La habitación era un poco pequeña para mis expectativas y el aparcamiento en la zona es complicado.

decoración de montaña, proximidad al aparcamiento, guardaesquís a la entrada

Las habitaciones son más bien pequeñas, especialmente si viajas en invierno con todo el equipaje. La señal de wifi podría ser mejor y el aparcamiento cercano es complicado. ¡Un poco más de atención a las amenities del baño no vendría mal!!!

La atención es realmente excepcional y familiar.

La atención personalizada fue excepcional.

El entorno es increíblemente tranquilo.

La experiencia en el hotel no fue tan maravillosa como esperaba. Durante nuestra estancia, el servicio fue lento y no cumplió con las expectativas. Además, las áreas comunes podrían beneficiarse de una limpieza más frecuente, ya que lastimosamente parecían descuidadas.

Increíble estancia! Así que acogedor y familiar, ¡un lugar ideal para relajarse y disfrutar de la conversación en el salón!

La estancia en besiberri fue inolvidable. La atención de la familia fue excelente, te hacen sentir como en casa. Además, la ubicación es perfecta, justo en el centro del pueblo. El desayuno es espectacular y se sirve al momento, ¡no te vayas sin probar los huevos fritos y bacon de Manolo!

Totalmente recomendable.

La atención del personal fue maravillosa. Me hicieron sentir como en casa. Pasé buenos momentos en el salón, conversando con otros huéspedes y disfrutando de un ambiente cálido. El desayuno fue destacado, no te puedes ir sin probar los huevos fritos y bacon. Me quedé 3 noches y aunque me hubiera gustado quedarme más días, la experiencia fue muy agradable.

Había cierta falta de espacio en la habitación que podría mejorar la comodidad. Se escuchaba ruido de las habitaciones contiguas.

Ubicació immillorable al poble, habitacions ben cuidades i netes. El tracte de la família excepcional, com si fossis de casa. No et perdis el berenar casolà, amb ous fregits i bacon, una delícia!

Estancia inolvidable en el Valle de Arán

Nuestra estancia fue realmente memorable. La familia que opera el lugar es increíblemente atenta y nos ofreció excelentes recomendaciones para disfrutar de la zona. Las habitaciones son acogedoras y muy limpias, y la tranquilidad del entorno es perfecta para descansar. Para mejorar, creo que podrían ofrecer más variedad en la fruta del desayuno, que aunque estuvo bueno, fue un poco limitada.

La decoración del hotel es acogedora y tiene un estilo de montaña encantador. Aunque la habitación era un poco pequeña, los colchones eran cómodos y el desayuno estaba bien preparado, aunque podría ofrecer más fruta. El aparcamiento en las cercanías puede ser complicado, lo que es un pequeño inconveniente.

Ideal para una escapada en pareja

Desde el principio fueron increíblemente amables, sobre todo Eva, que se aseguró de que tuviéramos todo lo que necesitábamos. La habitación era clara y acogedora, y me encantó el desayuno en el que me prepararon una tortilla de queso que estuvo deliciosa.

No fue barato, pero aún así estaba bien.